No no soy la misma que hace un año,
una criatura frágil, confiada y sobre todo manipulable, en manos de
un encantador de serpientes, no ya no soy la conformista de siempre,
encerrada en el castillo, como un jarrón decorativo, o un cuadro
valioso, que esta seguro en la torre mas alta pero que hace tiempo
que ya nadie se molesta en contemplar ni disfrutar de el.
Si he salido del castillo he tomado un
camino que no se hacia donde va, ni tampoco me importa mucho cual
sera el destino final, esta vez, no he sido la princesa que espera el
príncipe azul, que trepe por su pelo, ni mate a un dragón para
sacarla del alto torreón, esta vez, he salido sólita, he descendido
yo sola de la torre, no digo que fuera fácil, en el descenso, he
sufrido rasguños, magulladuras e incluso algún golpe en la cabeza
que me ha dejado ciega he inconsciente durante un tiempo, pero he
salido, que es lo importante.
Miro a mi alrededor y parece mentira
que haya pasado un año, entraste en mi vida, la volviste del revés,
me rompiste en mil pedazos y desapareciste, gracias por todo ello,
fue el principio de todo, fuiste falso, mentiroso, manipulador,
dañino, pero me mostraste, lo que no quiero ser, ni jamas seré, un
ser egocéntrico, que se cree sus propias mentiras y fantasías, que
necesita ser quien no es ni nunca sera, para sentirse alguien pues es
tan mediocre, tan poca cosa, que necesita invertarse una vida para
ser alguien medianamente interesante.
Pero no eres el único al que tengo que
dar las gracias por este año, hay a quien tengo que dar las gracias
por muchos mas años de mi vida, o si, a ti también te doy las
gracias, gracias por enseñarme que hay gente que necesita, tener a
alguien a su lado, para poder ser un desgraciado infeliz y tener a
quien echar la culpa, gracias por ignorarme, por no amarme, por ser
un pobre amargado de la vida, que se escondía bajo mis fallos, para
poder ser desgraciado, para poder culparme de la falta de energía,
de animo, de ganas de vivir, de dinero, de todo jajaja, gracias,
gracias y mil gracias, así cuando he salido de tu castillo. He visto
la belleza que había fuera, el olor de las flores que yo sabia que
estaban, pero que tu amargura no me dejaba ver, y poder aprender,
que el amor no se suplica, que las caricias no se imploran en el
rincón de una cama mientras las lagrimas brotan de las mejillas,
enserio gracias, por que ahora he visto la belleza de un Te quiero,
cada mañana, de un Te amo cada noche, como si fuera la primera vez,
de cada vez que una mano roza mi piel, con amor, con cariño, con
deseo, de unos ojos que me miran como si fuera lo único que existe
en la habitación, en la casa, en su mundo y en el mio. Gracias por
no darme jamas tu apoyo, en nada de lo que he deseado o querido hacer
en mi vida, por que así, he podido, ver la diferencia, entre dejarte
hacer lo que te apetezca, siempre que no molestes mucho y apoyar a tu
pareja en todo, alegrarse de cada logro, gracias, por que cada vez,
que me preguntan que tal fue mi día, por que cada vez, que caigo en
la desesperanza, entiendo la suerte de tener unos brazos que me
levantan, unas palabras que me alientan.
Y si entrevéis, rencor en mis
palabras, andáis herrados no es rencor, son verdades, verdades que
no os gustan oír, verdades que posiblemente nadie os dirá, ni nadie
vera, o querrá ver, pero verdades al fin y al cabo.